– Por Lelia Castro –

Hasta el 20 de noviembre, de jueves a domingo, se podrá disfrutar el espectáculo del circo en la ciudad de Esquel, en el predio frente a la Terminal de Ómnibus, “un show sin precedentes para toda la familia”.

Charlamos con Daniel Molina, hijo del dueño del Circo Dihany, quien maneja todo el movimiento del espectáculo, y nos cuenta que pertenece a la cuarta generación de artistas de circo. Este circo que el 16 de noviembre próximo estará cumpliendo 10 años.

“El miércoles de la semana que viene cumplimos 10 años con esta hermosa aventura que se le ocurrió a mi papá y a mi mamá de poder sacar circo, toda la vida con el circo de mis abuelos, se dio la oportunidad de poder sacar un circo propio, mis padres decidieron hacerlo así. Y con el apoyo de la familia, mucho trabajo constante, luchando contra todo, contra viento y marea, contra las adversidades sobre todas las cosas, tenemos el circo Dihany hace 10 años y la verdad que un orgullo muy lindo porque podemos decir, yo particularmente, no tuvimos ayuda de nadie, hicimos todo a pulmón”.

 

 

Comenta que fue nacido y criado en esta vida, en la que se viven cosas buenas y malas, pero que brinda una gran cantidad de anécdotas y satisfacciones.

“Las cosas buenas, lo que te da la vida de circo es conocer toda la Argentina, y hasta países limítrofes. Eso es lo lindo de esta vida, esas anécdotas de poder viajar, conocer lugares nuevos, gente nueva”.

 

Un espectáculo tradicional de circo, en el cual se encontrarán arriba del escenario al maestro de pista, bailarinas, acróbatas, magos, trapecistas, contorsionistas, payasos, el globo de la muerte con motociclistas y el péndulo fantástico, entre otros. Acompañados de luces y sonido, para llevar a cabo un espectáculo vistoso y atractivo.

Cuenta que son una gran familia: padres, hijos, tíos y primos, viajando a través del país, cada familia viviendo en una casa rodante. Durante los traslados de una ciudad o pueblo a otro van compartiendo charlas, mates y anécdotas.

Para ellos, lo primordial es el público, sin el cual no podrían seguir subsistiendo: “Tratamos de que sea algo lindo para la familia, que la pasen bien, y brindarle todas las comodidades posibles dentro del espectáculo”. Dando mucha importancia al aspecto tanto visual como para presentarle un espectáculo lindo a la gente, prolijo, tanto dentro como por fuera del circo.

Según Daniel, cuando llegan a un lugar, le dan vida a un espacio que no la tenía. Para lo cual, pagan todos los impuestos municipales para poder trabajar.